A veces al caer el sol
El último año de la primaria finalizó en un viaje rural con todos los integrantes del curso; la parcela familiar donde se podría acampar acompañado de diversos amigos de ese período.
Me embarga una tristeza, un sentimiento profundo
que humedece mis ojos
En uno de los caminos se encontraba un viejo taller con una sierra eléctrica que había sido desarmada por seguridad de los invitados.
Las opciones son tantas y tan rápidas que me paralizan
Se volvió a armar y se encendió el motor. A la distancia los gritos se volvían más acentuados confluyendo en el reto de una septuagenaria que descendía por la colina al caer la tarde.
Es echar de menos un momento que no existe?
O es recordar lo que pudo ser?
Un compañero había tenido un sueño dónde se cortaba el brazo mientras corríamos con un nudo en la garganta, al esconderse de la despresentación del hoy.
Uno
Dicen que la vida es demasiado corta pero se equivocan,
es demasiado larga
El presente se reduce a un punto fugitivo. Soy uno más.