Partía viendo como se jugaba (Baldur´s Gate 2?). O parece que era yo quien jugaba. Movía al personaje, peleaba, tenía buenos gráficos. Mi hermano me acompañaba. Y como siempre en este tipo de sueños la perspectiva cambia derrepente y ya no era observador, estaba adentro. Y salí por una puerta del dungeon. Era una playa con bastante gente, probablemente verano. Y mirando al horizonte ví que el mar estaba demasiado recogido, a lo lejos (mis ojos no me engañaban) una gran ola se acercaba, con todo el peligro que eso trae. La gente entró en pánico y comenzó a correr...La ola llegó muy rápido y se llevaba gente; una imagen, recuerdo que una mujer de tez oscura (africana) nadaba y trataba de salvar sus hijos con una destreza y fuerza increíbles. Nosotros también corrimos y por poco casi fuimos alcanzados por la fuerza del mar. Más tarde, un par de días parece creo que ví en la noticias el miedo que causó un sismo en la zona de indonesia dónde ocurrió el marremoto hace un par de años. Esa misma semana la pasé vacío, triste también. La ola venía con fuerza. El fin de semana volví a mi casa y mi playstation 2 dejó de funcionar. Al menos para los juegos piratas. El chip se fundió. Todo tiene su tiempo y eventualmente se transforma sin avisar. Quedamos solos. En los 3/4 de febrero mi señal wifi también se fué, encondida en las sombras por una clave. También me fuí de donde había estado estas 2 semanas. Volví al hogar. Ahora hay parilladas argentinas al lado. Andaba caminando solo, vacío otra vez, pensando sin pensar realmente, hacia el turno esta mañana. Pero no esta tan mal. A veces el queso es demasiado salado, pero es mejor tener algo que comer...
La avena me esperó desde el año pasado, todas las vacaciones aquí, para que hoy la comiera junto con un yoghurt de 100 pesos.
Qué coincidencia escondida hay en todos estos acontecimientos? Qué verdad oculta no logro objetivar y admirar dentro de este mar que también se recoge ahora. Veo a lo lejos una ola. Un mar de dudas amenaza con golpear la playa.
Mañana: la semana 3...