El sonido que hace el ventilador del notebook me hacía recordar las olas del mar, al menos al principio.

“En mi mejor momento”
Me quedé pensando en la frase, frasecita, frase, franbuecita, frase, frambuesa…ehh…no soy (ni volveré a ser) un demente espacial. Thus, guardé las arcadas y el vómito para una ocasión que lo amerite mucho más. Thus, los huevos siguen, había un montón de huevos, chicos, grandes, tan grandes como un tanque, de Fénix, uno blanco de dónde nace nuevamente y otro negro rodeado de misterio, huevos de pascua, dulces y de colores. Sin embargo, aún retumba el eco como pequeñas descargas eléctricas en la sombra de una ciudad que parecía conocida y que estaba soñando. En mi mejor momento? En mi mejor momento?! En mi mejor momento ?!!!No seria capaz de responderme a mi mismo. Sueños raros, el inconsciente intentando mandar señales. Pero todavía no escribo nada acerca de ellos.